Quito.- La comercialización a través de internet, creación de la cultura digital, preocupación del sector textil que es sensible, productos de exportación desde Ecuador con arancel cero, objeciones y otros temas, fueron abordados por los comparecientes en la Comisión de Relaciones Internacionales, en el análisis del Tratado de Libre Comercio con la República Popular China.
Gisela Montalvo, de la Cámara de Innovación y Tecnología del Ecuador, CITEG, resaltó las ventajas del comercio electrónico para llegar a más mercados, acompañados de políticas estatales para su fomento. Así mismo, detalló las oportunidades del acuerdo por la importancia de la implementación de medidas técnicas y organizativas que fomenten la protección de datos personales; la investigación y conocimiento; emprendedores ecuatorianos y startups (empresas) digitales; y, desarrollo de la industria al incorporar nuevas herramientas digitales.
Guido Altamirano y Mario Manjarrés de ACONTEX, sector que genera 140 mil plazas de trabajo, señalaron que es necesario continuar con el arancel mixto fijado para productos confeccionados, controlar la subfacturación y el contrabando, así como prohibir de importación de ropa usada. Plantearon que se consideren estrategias de impulso al sector textil y confecciones del Ecuador, por lo que en el TLC con China se han excluido más de 400 partidas arancelarias, por ser un sector productivo sensible.
Edwin Vásquez, viceministro de la Producción, precisó que en el TLC para el sector textil se han excluido 509 partidas, considerando que Ecuador puede aplicar otras medidas en defensa de su producción nacional.
Ana Cecilia Andrade, gerente de F.L.P Latinoamerican Perishables del Ecuador S.A, empresa que exporta frutas frescas desde 1994, enfatizó que el TLC con China permitirá el comercio con la segunda mayor economía del mundo, beneficiando a los sectores agrícola e industrial. El 99,6 % de toda la oferta exportable actual pasaría con 0 % de arancel, en los productos: camarón, banano, bananito, flores, pitahaya, cacao, café y otros.
Los asambleístas reflexionaron sobre la necesidad de ampliar los beneficios para los sectores rurales, carentes de facilidades de ingreso a las nuevas tecnologías; propiedad intelectual; mapeo de posibles beneficiarios que actualmente utilizan el comercio electrónico; participación del sector textil en las negociaciones del TLC; salvaguardias para el sector textil; número de empleos; entre otros aspectos.
Objeciones al TLC
David Molina, director Ejecutivo de la Cámara de la Industria Automotriz Ecuatoriana, recordó la situación de los TLC de China, Chile, Perú y Costa Rica.
Afirmó que el tratado no ha sido ampliamente debatido, sobre la pertinencia, plazos, costos, beneficios y otros puntos. Bajo esta consideración expuso 12 conclusiones: el comercio bilateral entre Ecuador y China ha crecido sin necesidad de un TLC, pues las exportaciones ecuatorianas crecieron en un 40 % entre 2018 y 2022. El 72 % de las exportaciones son de camarón y el 24 % está concentrado de cobre y plomo.
Añadió que aún sin acuerdo comercial los vehículos chinos ya concentran el 35 % del mercado ecuatoriano; mientras los vehículos chinos han ganado mercado, los vehículos ensamblados en Ecuador han perdido participación. Otros sectores están en la misma situación, subrayó.
Concluyó que bajo la firma de un acuerdo comercial se proyecta que la tasa de crecimiento de las exportaciones de China a Ecuador sería de un 19 % y la tasa de crecimiento de las exportaciones ecuatorianas a China se estima en un 9 %. El impacto sería de USD 566,2 millones menos en la recaudación fiscal, producto de las importaciones provenientes de China.
También participó, en comisión general, Diva Durán, abogada de la compañía Zaimella del Ecuador, quien expresó su preocupación porqué en menos de 3 años las importaciones chinas con arancel llegaron al 40 % del mercado. Además, existe subvaloración en importaciones, violación de derechos de propiedad intelectual e incumplimiento de la normativa sanitaria.