Loja.- A los 163 años, han pasado del movimiento de Manuel Carrión Pinzano, que declaró a “Loja Federal”, hecho histórico en el sur del Ecuador; y, que hoy toma vigencia ante la propuesta del máximo líder del partido Social Cristiano Jaime Nebot al anunciar que Ecuador debe ser Federal.
Sin duda este es el acontecimiento más relevante de la historia de la provincia de Loja y para el país, destacan los doctores Gabriel García y Gustavo Ortiz, catedráticos de la UTPL y UIDE, respectivamente en el programa Expresión Polítika, que se transmite los sábados a las 07H30, por radio Planeta 106.1 F.M. SR. Radio y diario LA HORA.
Gustavo Ortiz recuerda que el movimiento de Manuel Carrión Pinzano en menos de dos años, estableció una estructura educativa con la cátedra superior de Jurisprudencia y da paso a la creación de la Universidad Nacional de Loja, de igual manera se crea la Corte Superior de Justicia, reorganizó políticamente el territorio provincial, habilitó el Puerto de Jambelí y realizó gestiones para la posterior creación del Obispado de Loja, entre otras acciones más.
De su parte Gabriel García sostiene que el federalismo lojano no fue un proyecto separatista, más bien evitó a que la República se desintegre en un momento que la Patria tenía tres gobiernos uno en Quito, Guayaquil y Cuenca; los lojanos en ese entonces elevaron su voz, en pronunciarse en el federalismo, movimiento que se había discutido en los orígenes de Colombia, gran parte de Santander y Bolívar iniciaron esta discusión, pero la decisión de Bolívar no supo leer que, gran parte del movimiento independentista se debía a ese excesivo centralismo de Madrid.
El federalismo ante el centralismo
El Gobierno Federal de Loja, “Es sumamente descentralizador” afirma Gabriel García, porque acerca las decisiones importantes del Gobierno a la gente, eso es profundizar la democracia, porque el centralismo no es una cuestión geográfica, el centralismo consiste en que muy pocas personas deciden en función de todos y el mejor ejemplo es que los mismos quiteños con victimas del centralismo, por ello la falta del sistema democrático en el país, esta empujando a un federalismo.
Gustavo Ortiz remarca que la estructura centralista ecuatoriana está en crisis, porqué actualmente está inconcluso el proceso de descentralización, que tiene tres componentes vitales como el administrativo, financiero y político; este último es muy importante, que es la facultad de expedir normas legales, que es la esencia de la administración política; en Ecuador ni siquiera las competencias que están en la Constitución, que son exclusivas por cada nivel de gobierno han sido asumidas y ejercidas, es decir no hemos avanzado a la descentralización administrativa y no hay voluntad de las administración central, peor de los Gobierno seccionales.