Jóvenes consideran que tendrán mayor oportunidad para desarrollar emprendimientos

Quito.- Con la presencia de representantes de la Federación de Estudiantes Universitarios (FEUE), de la Confederación de Organizaciones Campesinas (Fenocín), SERTECPET S.A., Alianza para el Emprendimiento e Innovación (AEI), Frente Ciudadano de Estudiantes y Becarios (FCEB), la Comisión de Educación intensificó el proceso de debate del proyecto de Código de Economía Social de los Conocimientos (INGENIOS).
El asambleísta Raúl Abad Vélez, presidente del organismo legislativo, reiteró que los criterios de los diferentes actores sociales, colectivos ciudadanos, de las entidades públicas y privadas son importantes como insumos para la construcción del informe de la normativa, que respetará siempre los tratados internacionales y la Constitución, tras indicar que en septiembre se prevé un recorrido por las universidades, a fin de acercar el contenido y beneficios de la propuesta a la juventud estudiosa del país.

Daniela Oviedo, presidenta de la Federación de Estudiantes Universitarios del Ecuador (FEUE), manifestó que es trascendental potencializar la universidad como centros de producción de conocimiento y desarrollo de la innovación. Actualmente, según la dinámica universitaria, se sigue calificando la mano de obra para que el estudiante salga a ponerla al servicio de las empresas o de los medios de producción establecidos, dijo.
Ahora, es necesario apuntar al emprendimiento, mediante la innovación y producción del conocimiento es histórico. Estamos convencidos que el proyecto tiene altos beneficios para toda la población, especialmente para los estudiantes y jóvenes, que son los potenciales emprendedores que pueden salir a ofertar nuevos servicios o productos en los mercados locales y mundiales, destacó, al enfatizar que es clave la democratización del conocimiento y que se requiere mayor inversión pública a la investigación, becas y actualización y perfeccionamiento de los docentes en investigación.
Valor a conocimientos ancestrales
Entre tanto, Franklin Columba, dirigente Nacional de Salud Indígena y Seguridad Social de la Confederación de Organizaciones Campesinas, Negras e Indígenas (FENOCIN), resaltó la preocupación de la Legislatura para definir normas que reconocen, garantizan, protegen y valoran el amplio conocimiento, ciencia, tecnología y saberes ancestrales de los pueblos.
Las materias primas, los investigadores y nuestros sabios espirituales, los amautas, que han sostenido al mundo, serán garantizados en sus derechos y tendrán la oportunidad de compartir sus grandes experiencias, sin el riesgo que ese tipo de cultura sea patentada y comercializada por determinadas personas o grupos empresariales, incluso transnacionales, precisó.
Cambio de la matriz productiva
Mientras, Bernardo Traversari, gerente de SERTECPET, señaló que el Código INGENIOS está alineado con la filosofía del cambio de la matriz productiva, más aún cuando responde al artículo 284 de la Constitución, que habla que uno de los objetivos de la política económica tiene que ser el incentivar la producción nacional.
Sugirió que la transferencia tecnológica de empresas extranjeras se dé en asociación con empresas locales calificadas con normas y altos estándares de calidad y que la innovación sea un activo que tiene que servir para apalancar los emprendimientos.
Potenciar becas
De su lado, Ángel Sotomayor, del Frente Ciudadano de Estudiantes y Becarios (FCEB), señaló que el código permitirá asegurar y migrar del capitalismo cognitivo a la economía social del conocimiento, por lo que es urgente potenciar que las políticas públicas de educación superior se conviertan en políticas de Estado, particularmente en la entrega de becas.
Un Ecuador innovador y emprendedor
Por su parte, Andrés Zurita, director Ejecutivo de la Alianza para el Emprendimiento e Innovación ((AEI), comentó que la organización está compuesta por 50 entidades del sector público, privado y académico, cuyo objetivo prioritario es posesionar a Ecuador dentro de los tres países más atractivos para emprender en Latinoamérica.
Planteó establecer los permisos necesarios para realizar actividades de investigación científica, así como exención de impuestos de ganancias de capital por empresas, fondos, fideicomisos que inviertan en capital de riesgo, además que se defina al software como un servicio.
Adicionalmente, la Comisión de Educación recibió a representantes de la Coordinación Campesina Eloy Alfaro, Asociación de Comerciantes y Distribuidores de Productos Audiovisuales y Auxilios Mutuos (ASECOPAC), la Corporación de Telecomunicaciones (CNT-EP).