Quito.- Con la presencia de varios sectores de emprendedores, en la Asamblea se buscan mecanismos para el desarrollo de la economía popular y solidaria como actor importante dentro de sistema económico, a través del emprendimiento. El Legislativo y el Ejecutivo se unieron para analizar alternativas que permitan conseguir este objetivo.
A decir del organizador del Foro, Jorge Yunda, esta es una gran oportunidad para identificar formas de contribución que faciliten, desde el ámbito legislativo, el desarrollo del emprendimiento en el país. “Lo que se pretende es que en el desarrollo de la economía no existan trabas y situaciones adversas, que truncan a muchos de los emprendedores con hiperregulaciones, permisos, impuestos, falta de créditos. “Buscamos desde el Legislativo, que el emprendimiento y el desarrollo de proyectos, especialmente para jóvenes, puedan cristalizarse”, expresó.
Se mostró partidario de apuntalar para que la economía popular y solidaria tenga todo el respaldo necesario. Explicó que los migrantes requieren facilidades para poder emprender en diferentes actividades; muchos comienzan con una tienda de abarrotes, una vulcanizadora, salón de belleza, taxis, porque quieren solo trabajar y, en vez de encontrar ayuda, encuentran trabas. Por tanto, se requiere de créditos, erradicar el chulco para que sea el Estado quien facilite los emprendimientos.
Eva García, ministra de Industrias y Productividad, dijo que están aplicando un portafolio de servicios, el cual desarrolla diversas actividades a favor del fortalecimiento de las unidades productivas de la economía popular y solidaria, articuladas con otras entidades del Estado. “Queremos tener una producción digna del mercado ecuatoriano, que dé las seguridades al consumidor, pero que también tenga la calidad para la exportación y es lo que se ha hecho, de la mano con este sector productivo”, subrayó.
Recordó que la Economía Popular y Solidaria está basada en relaciones de solidaridad, cooperación y reciprocidad. Se privilegia al trabajo y al ser humano como sujeto y fin de su actividad, en busca del buen vivir. “Trabajamos para que la economía popular y solidaria crezca, tenga facilidades, agilidad en los procesos, que sea generadora de empleo, como ha sido hasta ahora”, añadió.
La Ministra aseguró que los emprendedores, las unidades productivas artesanales y de la economía popular, así como las micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes) son un pilar fundamental para sostener la economía, fortalecer la dolarización y generar empleo digno. “Es por ello que reciben nuestro apoyo irrestricto con el objetivo de que los negocios logren sustentabilidad, sostenibilidad a futuro y prosperidad para todos. “La economía popular nos da lecciones, hay muchos obstáculos y lo importante no es quedarse en ellos, sino superarlos” enfatizó.
Carlos Oñate, del Observatorio de la Pequeña y Mediana Empresa (PIME), de la Universidad Andina Simón Bolívar, precisó que la interacción entre las universidades y el sector económico y productivo del Ecuador debe ser constante y profundo. En relación a la economía popular y solidaria, subrayó que la ley vigente sobre esta materia en Ecuador no establece mayores detalles sobre la participación de entidades académicas en la generación de conocimiento e información del sector.
Saskia Moncayo, coordinadora de Mercados Internacionales del Instituto Nacional de Economía Popular y Solidaria (IEPS), aseveró que la mayor parte de organizaciones registradas en la Superintendencia de Economía Popular y Solidaria corresponde al grupo de producción, con un 56 % del total de organizaciones; seguido del 41 % de organizaciones que se dedicada a los servicios. «Buscamos fomentar la economía popular y solidaria a través de cadenas productivas pertinentes y vinculadas a las vocaciones de cada territorio, que generen desarrollo local, afirmó.
Marcelo Áchig de la Cámara de Economía Popular y Solidaria del Distrito Metropolitano de Quito y dirigente comunitario, explicó que el desarrollo no depende solo de la existencia de las instituciones que rigen la economía popular y solidaria, sino de la incidencia de las políticas públicas en el desarrollo económico, social y cultural. La economía popular y solidaria, no es únicamente una forma de subsistencia económica, es un espacio propicio para la innovación orientada a resolver problemas específicos de nuestra sociedad y generar las condiciones para el inicio de un cambio de matriz productiva, advirtió.
Representantes de organizaciones del sector y ciudadanos formularon preguntas relacionadas con la problemática del emprendedor. Se analizan hiperregulaciones, requisitos, crédito social, seguro solidario, entre otras temáticas.
Participaron, también, Luis Ibarra, director de emprendimientos del Ministerio de Inclusión Económica y Social; Martín Ramírez, representante de la Corporación Nacional de Finanzas Populares y Solidarias, Conafips; y, Alexander Paredes, gerente de colocaciones y capacitaciones de BanEcuador.