Loja.- Conoce más sobre esta investigación en la que participaron docentes e investigadores de 22 instituciones del país y del extranjero.
Ecuador se ubica entre uno de los países con mayor diversidad de líquenes. En las últimas décadas, se han incorporado nuevas especies al listado que existe en el país, provenientes especialmente de zonas como Loja, El Oro, Azuay y las Islas Galápagos.
Ángel Benítez Chávez, docente investigador de la Universidad Técnica Particular de Loja, explica que el estudio de los líquenes ha presentado nuevos desafíos desde 2016, debido a la publicación de un artículo en la revista Science, donde se describió la presencia de un tercer simbionte perteneciente a las levaduras.
Estos organismos, destacan como un componente importante en la biodiversidad de ecosistemas del Ecuador. Sin embargo, este grupo ha sido poco estudiado a escala nacional por su dificultad taxonómica y la falta de investigadores que se enfoquen en temas taxonómicos, ecológicos, fitoquímicos y genéticos.
En el 2012, se contaba con un listado no publicado, que registraba alrededor de 900 especies de líquenes en Ecuador,por lo que investigadores de 22 instituciones del país y del extranjero, incluyendo a Ángel Benítez Chávez, Yadira González Rentería y Gabriela Cevallos Solórzano, investigadores de la UTPL, unieron esfuerzos y desarrollaron un estudio colaborativo para presentar el primer listado oficial de especies de líquenes.Este listado oficial reporta 2 599 especies, distribuidas en 513 géneros y 130 familias.
El estudio, que se encuentra publicado en la revista científica The Lichenologist de la Universidad de Cambridge (Inglaterra), detalla la presencia de líquenes por región y por especie;allí, se evidencia que en la región Insular (70%) existe un mayor número de especies de líquenes, seguido de la Sierra (22%), Amazonía (6%) y Costa (1%).Estos estudios ofrecen pautas claras para futuras investigaciones de la liquenología en Ecuador.
Para esta investigación, se desarrolló una lista de verificación, mediante la revisión de registros bibliográficos que datan del siglo XIX hasta la actualidad. Posteriormente, se incorporaron datos y registros a una plataforma basada en Symbiota, un software de código abierto para gestionar y movilizar datos sobre biodiversidad del Consorcio de Herbarios de Líquenes, donde participan 181 instituciones de América del Norte y Latinoamérica, así como de Europa, Asia y Oceanía.
Ángel Benítez Chávez resalta el trabajo colaborativo de la UTPL con instituciones nacionales como la Universidad Central de Quito, el Instituto Nacional de Biodiversidad (Inabio), la Universidad Técnica del Norte, Universidad del Azuay, el Grupo Latinoamericano de Liquenólogos, así como el trabajo colaborativo con universidades internacionales como la Universidad Estatal de Arizona y la Universidad Rey Juan Carlos.
El docente explica que este nivel de biodiversidad se debe a que el país cuenta con diferentes ecosistemas como bosques secos, bosques montanos, bosques amazónicos y páramos, que son el hábitat perfecto para las distintas especies de líquenes. El investigador precisa que, en torno a los líquenes, todavía existen desafíos en materia de descripción de especies y precisa que el listado muy pronto deberá actualizarse y seguramente el número de especies aumentará.
En este sentido, el docente destaca el rol del herbario HUTPL como un punto estratégico para la gestión de colecciones botánicas, incluyendo la colección de líquenes. En la actualidad, en este espacio existen cerca de 18 000 colecciones de plantas vasculares, hongos, líquenes y briófitos. El herbario HUTPL se enfoca en realizar estudios de caracterización morfológica, taxonómica y sistémica, así como almacenamiento y conservación de muestras botánicas de la biodiversidad, que sirvan de base para sustentar estudios ecológicos, genéticos, biogeográficos, etnobotánicos, filogeográficos, bioquímicos (obtención de productos de origen natural) y de conservación.
Con su participación en este tipo de iniciativas, la UTPL contribuye a la investigación y producción de conocimiento relevante para la gestión de la biodiversidad en Ecuador.