(Redacción LA ONU).- El 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, tendrá lugar en Nueva York el concierto Mujeres globales en la música, un evento en el que todas las obras estarán compuestas por mujeres. Las partituras serán interpretadas por la Orquesta Sinfónica de las Naciones Unidas y la dirección estará a cargo de la directora afroamericana Anoa Green.
Diplomática de la Unión Europea y experta en gestión de conflictos, defensa y seguridad; española y ciudadana del mundo, apasionada de la música, Verónica Sabbag decidió combinar el mundo diplomático y el musical y fundó la ONG Voces unidas por la paz con el objetivo de unir a diferentes comunidades a través del lenguaje universal de las artes.
“Esta iniciativa refleja bastante quién soy yo. Es una manera de juntar esos dos mundos en los que he vivido, que son, por un lado, el mundo diplomático y por otro lado el mundo de la música y de las artes en general”, cuenta a Noticias ONU.
Verónica estudió canto en el conservatorio y encontró la manera de reintroducir su pasión por la música en su carrera profesional a través de la ONG. Cree que esta iniciativa crea un espacio de diplomacia cultural o de diplomacia creativa, en el que el diálogo y el acercamiento son los protagonistas.
Según las estadísticas, solo el 5% de la música programada en las orquestas alrededor del mundo está compuesta por mujeres. Para contrarrestar esta cifra, Verónica ha organizado a través de su ONG un concierto, Mujeres globales en la música, en el que todas las obras han sido compuestas por mujeres. Programado para el 8 de marzo, el evento estará dirigido por una mujer afroamericana, Anoa Green.
“El objetivo no es otro que el tratar, como digo primero de avanzar en la igualdad de género. ¿Y cómo queremos avanzar? Con una iniciativa como ésta, en la que vamos a visualizar, lo vamos a ver en un escenario, cómo le vamos a dar por fin voz y eco al trabajo tan arduo que han llevado a cabo estas mujeres compositoras y a las que quizás no se les han dado las oportunidades necesarias”.
Como explica Verónica, el programa cuenta con las obras de diez mujeres compositoras. “Como se trata de la Orquesta Sinfónica de Naciones Unidas, hemos querido también asegurar un cierto equilibrio geográfico, demostrando que el talento existe en el mundo entero”.
“El concierto se abre con una obra de Louise Farrenc, que es una compositora francesa del siglo XIX que abrió la puerta a muchas otras mujeres. Ocupó un lugar predominante como profesora en el Conservatorio de París y luchó por la igualdad de sueldo porque, desgraciadamente y a pesar de haber llegado a donde llegó gracias a su talento exclusivamente, le pagaban la mitad del sueldo”.
La falta de representación, un problema sistémico
La fundadora de la ONG señala que, ante la existencia de talento femenino, la falta de representación y la desigualdad de género se deben a un problema sistémico observable en todos los demás campos profesionales. “Lo que faltan son oportunidades. (…) Creemos que ha habido avances en la identificación del problema (…) pero ahora ya creo que tenemos que ir más allá. Todo lo que se llaman las medidas de concienciación ya no son suficientes”.
Sabbag espera que iniciativas como ésta se puedan institucionalizar, y más aún, ser replicadas por orquestas de otras partes del mundo. “La orquesta está absolutamente emocionada por esta posibilidad de poder repetir, aunque sea una vez al año, este tipo de experiencias. ¿Por qué no? ¡Que se multiplique!”, exclama.
Sin embargo, la diplomática admite que el objetivo es alcanzar un equilibrio, que los organizadores de los conciertos a nivel global incluyan de forma intuitiva a mujeres en el repertorio o piensen en mujeres para dirigir orquestas.
Poco amiga de las cuotas, Verónica admite que en muchos casos son “un mal necesario” para generar cambios que permitan alcanzar un equilibrio no solo en el mundo de la música, sino en también en todos los demás ámbitos.
La música, más indispensable de lo que creíamos
Verónica agradeció a todos los músicos su labor durante los confinamientos debidos a la pandemia de COVID-19, quienes se lanzaron a las redes para animar, recrear y velar por la salud mental de millones de personas en todo el mundo.
“La pandemia desde luego ha afectado muchísimo a los artistas y no es justo, porque nos dimos cuenta de que fueron los primeros que intentaron enviar mensajes positivos y entretenernos en nuestras casas mientras estábamos confinados. Iniciativas como este concierto son una manera de devolverles lo que han hecho por nosotros”, declaró.
“Hay que creer en una misma, hay que saber que uno puede lograrlo y luego saber movilizar también esos apoyos, esa solidaridad de quien cree en nosotras”, agregó
Verónica destacó la concienciación y las iniciativas de las mujeres en todas partes y reconoció el apoyo a la organización de muchos hombres, en especial del director de la Orquesta de las Naciones Unidas. “Ha sido nuestro primer apoyo y un apoyo absolutamente imprescindible para lograr la organización de este concierto”.
El futuro es de los artistas
Al preguntarle por su visión sobre un mundo en el que hubiera una misma representación de mujeres y hombres, Verónica asegura que en el futuro la representación debería ser tan equitativa que el género no tuviera importancia. “La manera en la que veo la evolución de la igualdad de género en la industria de la música es muy sencilla: es que dejemos de ver a los artistas como mujeres o como hombres y que sencillamente los veamos como artistas. Como digo, estamos promocionando esta iniciativa para intentar alcanzar un equilibrio y así es como veo el futuro de la industria de la música”.