Urge fiscalización a la delegación del transporte urbano

Nota del Editor

El presidente del Consorcio de Transportistas, Edgar León, estuvo invitado al programa, pero mediante comunicación por chat afirmó: “…no puedo ir el día sábado a su entrevista porque en realidad no queremos darle importancia a este señor, todo fluye bien, con normalidad, de lo que es el transporte, por favor discúlpeme”.

Loja.- Es urgente la auditoría a la transportación urbana de la ciudad, cuyas competencias están delegadas al Municipio de Loja, pedido que coincidieron Oscar Pineda, activista ciudadano, y Marcos Quishpe, presidente de la Federación de Barrios de la Campiña Lojana (Febacalo), en el programa Expresión Polítika, que se transmite los sábados a las 07:30, por radio Planeta 106.1 FM, SR. Radio y Diario La Hora.

Oscar Pineda argumenta la necesidad de ir a una transportación Municipal como se la realiza en otras ciudades, para lograr una integración de todos los barrios de la ciudad y los que se están creando.

De su parte, Marcos Quishpe considera la urgencia de articular un plan de movilidad que articule la conectividad entre la ruralidad y lo urbano, “por ello, es necesario que el Municipio tome en serio esta planificación y no se deje manipular por un consorcio privado de la transportación, el mejor ejemplo es la ruta Sauces Norte hasta la Argelia, donde el Municipio invirtió en toda la infraestructura y el Consorcio privado de transporte, nada”, argumentó.

Transporte público o privado

El Consorcio de Transporte, no es un sistema de movilidad, es un grupo de empresarios que trabajan en transporte y brindan servicio a los lojanos. El Consorcio se ha atribuido, mediante monopolio, la logística del transporte urbano a nombre de la ciudad, es el criterio de Expresión Polítika.

Oscar Pineda puntualiza la necesidad de que se involucre a más sectores en la prestación del servicio de transportación pública, por ejemplo, deberían estar las universidades que faltan, con un transporte universitario y este sería un aporte significativo a la movilidad de los estudiantes, el mismo Municipio debería pensar en rutas ecológicas, esa es la parte fundamental para ingresar a más actores y debatir estos temas de las nuevas formas de movilidad en Loja.

Marcos Quishpe sostiene la necesidad de tener estudios técnicos que deberían ser socializados por la ciudadanía y se pueda constituir un gran sistema de movilidad, argumentó: “el Municipio invirtió más de $2 millones en las estaciones de transferencias que no cumplen su función”.

Movilidad Urbana y Cohesión Social

Loja debe construir un sistema de transporte y modelos para el desplazamiento, para una convivencia civilizada en la ciudad, con puntos fuertes de organización que eviten la desigualdad social y se establezca una cohesión social, acotó Marcos Quishpe.

Oscar Pineda señala la necesidad de otorgar alternativas ciudadanas para que decidan y seleccionen la forma de desplazamiento que más se ajuste a sus necesidades y realidades económicas para acceder sin restricciones a los servicios y oportunidades de transporte que ofrece la ciudad.

El sistema de transporte que considere restricciones de movilidad, genera obstáculos y dificultades para realizar actividades ciudadanas y limitan la oportunidad de desarrollo, acotó.

De las fisuras al abanico de posibilidades del transporte urbano

Abrir el abanico de las posibilidades de inversión económica para mejorar el sistema de transporte urbano del cantón Loja, es tema prioritario y de gran envergadura para el Municipio del cantón, en función de restablecer la dignidad del usuario del transporte, frente a los excesos administrativos y operatividad del Consorcio del Transporte, quienes, con ordenanza en mano, obligan a la compra de una tarjeta para uso de transporte urbano, violentando derechos constitucionales y humanos del ciudadano.

La falta de claridad legislativa cantonal, que permite el manejo a discreción del sistema de movilidad de la ciudad, mediante un monopolio, cuyos intereses particulares han llegado a establecer la obligatoriedad de comprar una tarjeta, cuyo costo es de casi $2, son asumidos por el usuario, caso contrario, no puede utilizar el transporte.

Regulaciones, de este tipo, deben cumplirse al pie de la letra, caso contrario existen sanciones por desobediencia. No se legisla en hacer prevalecer el derecho y necesidad del ciudadano de contar con movilidad eficiente mediante un sistema de transporte bien diseñado y estructurado, donde la garantía constitucional no sea socavada por lo moderno, frente a la moneda en curso u oficial que establece la Constitución.

Estas fisuras motivan a preguntar a concejales y autoridades municipales de abrir el abanico a inversiones para mejorar el transporte, mediante sistemas de movilidad bien planificados, bien socializados y especialmente sostenibles con la economía, con el medio ambiente y con los mismos ciudadanos.

La realidad de edificar un sistema de transporte municipal y de otros sectores de la economía y ciudadanía, están en el escritorio de análisis en las mesas de la gobernabilidad y de la legislación cantonal; permitir ello, es abordar la problemática existente con responsabilidad política y legislativa de la movilidad del cantón Loja.

Replantear los marcos jurídicos de ordenanzas poco claras sobre movilidad y transporte del cantón y cambiar el modelo de la administración de tránsito a una verdadera Dirección o Secretaria de Movilidad, Conectividad y Transporte del cantón Loja.